miércoles, 22 de agosto de 2007

EL ALCOHOL PERJUDICA SERIAMENTE... A LAS MUJERES. CIENTÍFICOS ALEMANES DESCUBREN QUE EL SEXO FEMENINO ES MÁS VULNERABLE A LOS DAÑOS QUE PROVOCA LA ADICCIÓN A LA BEBIDA
O la Madre Naturaleza es machista, o ejerce un papel excesivamente protector sobre las mujeres. Un grupo de científicos de la Universidad de Heidelberg (Alemania) ha determinado que el alcohol perjudica más al sexo femenino, de tal manera que éste (mejor dicho, éstas) tienen más riesgos de convertise antes en adictas y su masa cerebral disminuye de manera más rápida que la de los hombres si se dedican con frenesí a la bebida.
¿Otra demostración más de que las hembras son las débiles? «No precisamente», a juicio de Alexander Diehl, uno de los coautores del estudio, «sino que las mujeres tienen un metabolismo diferente al de los hombres y éste está más preparado para prevenirlas del alcohol». Así, es cierto que los chicos se ven atraídos por la cerveza, el vino o cualquier licor antes que las chicas. Pero, una vez atrapadas ellas, su organismo tiende a rendirse antes a la dependencia del alcohol y a ser más vapuleado.
Respecto a la pérdida de la masa cerebral, las consecuencias las pagan también las mujeres, pues sufren en la mitad de tiempo los mismos daños cerebrales que ellos.
Estas y otras pruebas de que existen diferencias de sexo hasta en el consumo de alcohol los han ido descubriendo en la Universidad de Heidelberg, gracias al seguimiento y análisis pormenorizado de 158 personas: 76 alcohólicos (34 hombres y 42 mujeres) y otros 82 voluntarios sin adicción alguna (de ambos sexos y en porcentaje equilibrado de participantes), divididos en grupos similares de edad, educación o grado de inteligencia.
Atrofia cerebral
Los científicos de Heidelberg observaron y estudiaron a este largo centenar de personas durante seis semanas y las conclusiones fueron bien claras: los hombres son más resistentes al alcohol y las mujeres que lleven cinco años siendo alcohólicas han sufrido ya una atrofia cerebral exactamente igual a la de aquel alcohólico masculino que se encuentra hundido en la bebida desde hace más de 10 años.
«Pero no todo es malo, sino que este estudio refleja un dato totalmente nuevo y positivo», aclaraba ayer Diehl, vía telefónica, desde su despacho de la universidad germano-oriental. «Previamente a esta investigación, se decía siempre que el volumen cerebral perdido no se podía recuperar. Sin embargo, nosotros hemos descubierto que no es así, esto es, que se puede revertir, pero sólo si nunca, nunca más, el afectado vuelve a probar una gota de alcohol», añadía didácticamente Diehl.
Los autores del estudio, liderados por el profesor Karl Mann, han decidido extender sus investigaciones, cuidándose ahora de tener en cuenta los aspectos genéticos. «Y mucho más...», anunciaba Diehl. «Pues no es lo mismo ingerir cerveza que whisky o vino».